La ocurrencia Genial Un día del mes de julio de 1995, a las 6:30 horas de la mañana en la Nacional 301 Cieza-Venta del Olivo, surgió uno de los acontecimientos más importantes en la historia de la humanidad. ¿Fue un producto de la buena suerte o del azar? Más bien podíamos llamarlo: "La ocurrencia genial". Mariano Marín Ato y José María Martínez Villa, o Mariano Colines y Mosky, como cariñosamente somos conocidos por nuestros compañeros y amigos, íbamos a crear una obra maestra del arte: El concurso de lanzamiento de huesos de Oliva con la boca y sin canute. Comenzamos a elucubrar. ¿Cómo lo hacemos? ¿Cuáles son los huesos de nuestra tierra? -Tenemos melocotón, albaricoque y ciruelas. -No, estos son muy grandes. Tiene que ser algo más sutil y de fácil dominio. -Lo más típico de Cieza son nuestras olivas. ¡Ah! y acompañadas de una buena cerveza. -Pues lo hacemos con huesos de oliva. La ocurrencia estaba servida. Muchas gracias a todos aquellos que nos apoyaron desde el primer momento y, en especial, a los que han fallecido.
Cieza (Murcia)